Terapias altenativas en veterinarias

MV Jorge S. Muñoz
Veterinario Homeópata y Cirujano.

Veterinario homeópata y cirujano. ¿Son las terapias alternativas una solución a todos los problemas. ?
¿Cuales son los pacientes que concurren a su consultorio buscando solución a sus problemas. ?
¿Cuales son estos problemas. ?
¿La homeopatía es una especialidad o simplemente el uso de otro tipo de medicamentos?
Este tipo de preguntas, nos las hacen personas que se enteran de nuestra especialidad: la homeopatía veterinaria. Y representan las inquietudes de muchos de ustedes.
Hoy se habla de terapias alternativas y complementarias, porque la homeopatía como otras especialidades médicas se incorpora a la terapia sólo si es necesario. No todos los casos necesitan de un tratamiento homeopático, o del uso de flores de Bach o de acupuntura o quiropraxia, de la misma manera que no todos los casos necesitan de una cirugía para poder ser resueltos.
La homeopatía es una especialidad de la veterinaria que requiere de un curso de postgrado (luego de recibido de veterinario) de 3 años con exámenes anuales y un diploma que lo acredite a uno como especialista.
La gente llega a nosotros por dos caminos:
Uno a través de alguien que le fue bien con un tratamiento homeopático y nos recomienda. Dos alguien desesperado con un caso grave, que se entera por algún medio de nuestra existencia y nos llama.
Pero también esta la vecina de la otra cuadra que concurre a la veterinaria simplemente con algún problema y no sabe de nuestra especialidad y nosotros la ayudamos a resolver su problema con homeopatía o con el tratamiento que necesite, que puede ser el uso de un pulguicida o una buena dieta o algún otro manejo simple.
Recuerdo el caso de Ginete, una Siberiana que entró en nuestra clínica, temerosa, con la cola entre las patas y ese temblor que tienen algunos perros cuando entran en un consultorio veterinario. Estaba detrás del dueño y nos espiaba con curiosidad. Luego su curiosidad fue mayor que su miedo y se acercó cuando le mostré una ratita de juguete. El dueño nos contó que Ginete, mojaba su cucha con pis. A la noche se hacía pis en su cama. Pensaron que tomaba frío o que no retenía y la sacaban a última hora de la noche o que comía cosas saladas y tomaba mucho líquido por lo que le retiraron el agua a la noche, pero el problema seguía. Una revisación clínica de Ginete, nos mostró a una perra de 2 años, fuerte, sin alteraciones evidentes, buen estado físico, buen pelo, buenos dientes, correcto el funcionamiento de su corazón, de sus pulmones, de su aparato digestivo. Se le extrajo sangre y orina para hacer los exámenes de rutina, que luego demostraron estaban normales.
Descartando de esta manera algún problema metabólico, renal o infeccioso que nos explicara su trastorno. Lo que padecía Ginete era una enuresis de origen emocional. Muchas veces los animales reaccionan físicamente a problemas emocionales y de esta manera nos están avisando. Pero ¿Qué problema emocional tenía Ginete? Por mas que preguntamos y preguntamos, no salía ninguno, llevaba una vida normal, era alegre y juguetona, no tenía ningún problema, ni stress. No leía los diarios, ni pagaba impuestos ni tenia que lidiar con un jefe autoritario ni nada por el estilo. Pero evidentemente algo le estaba pasando. La homeopatía nos da una gran batería de medicamentos para tratar estos problemas, aún sin detectar cual es su origen verdadero. Se buscó su medicamento constitucional, aquel que por su forma de ser, por su forma de reaccionar, por su tropismo, por sus características metabólicas, sus deseos de comida, su reacción al frío y al calor, surgiera. Elegí un medicamento que se llama Pulsatilla y con él Ginete se curó. Un antibiótico no la curaría, no porque los antibióticos no sirvan, sino porque en este caso no actúan porque no hay infección. No hay una mejor terapia que un bien elegido remedio. En este caso fue un remedio homeopático.


Artículo extraído del sitio: http://www.homeovet.com.ar/homeopatia/Terapias_alternativas_en_veterinaria.htm